Los líderes y lideresas de la Federación de Comunidades Nativas de Ucayali y Afluentes (FECONAU) y de la Organización Regional Aidesep Ucayali (ORAU), brindaron el 27 de enero una conferencia de prensa donde dieron detalle sobre la demanda que han presentando al Estado pidiendo la cancelación del proyecto Hidrovía Amazónica, el cual aseguran atentaría contra su derecho a vivir en un ambiente adecuado.
Pero eso no es todo, pues los estudios del proyecto que busca dragar los cuatro ríos más importantes de la Amazonía (Huallaga, Ucayali, Marañón y Amazonas) para crear un canal de navegación que transporte mercancías, no ha determinado los impactos que generaría en los afluentes y las 424 comunidades indígenas que cruza.
Foto: ORAU
“Hemos presentado esta demanda porque consideramos que este proyecto acarreará grandes impactos en la forma de vida y el ecosistema de las comunidades indígenas”, dijo Berlín Diques Ríos, presidente de la ORAU para Servindi.
Asimismo, el presidente de la FECONAU, Miguel Guimaraes Vásquez indicó que esta obra no está “proyectada a beneficiar a los pueblos indígenas. Está proyectado para las grandes empresas”.
“Las grandes economías piensan que los ríos no tienen espíritu, pero para nosotros, los pueblos indígenas, sí son muy importantes porque cumplen funciones vitales y albergan a muchos seres vivos”, agregó Lizardo Cauper, presidente de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep).
Los líderes indígenas señalaron que no han sido incluidos en el debate de este proyecto. “El proyecto empezó en el año 2005; sin embargo, sólo gracias a la demanda presentada por la ACODECOSPAT, una organización indígena de Loreto, se dio el proceso de consulta previa”, recordó David Ruiz Urquía, presidente de la Federación de Comunidades Nativas del distrito de Padre Márquez (FEDCIPAM).
La consulta previa de este proyecto, que culminó en 2015, se dio después que el Poder Judicial fallara a favor de las comunidades indígenas y ordenara al Estado cumplir con el proceso.
Piden cancelar Hidrovía
La demanda de amparo contra el proyecto Hidrovía Amazónica fue presentada el 22 de enero ante el Segundo Juzgado Civil de la Corte Superior de Justicia de Ucayali. El pedido de cancelarlo se basa en la aplicación del principio constitucional precautorio.
“Este principio lo que señala es que, si no existe certeza científica sobre los impactos que una obra puede causar, como en el caso de la Hidrovía Amazónica, se debe suspender el proyecto”, dijo, Juan Carlos Ruiz Molleda, abogado del Instituto de Defensa Legal, quien asesora la demanda.
Asimismo indicó que la demanda busca que se declare la nulidad de la norma que aprueba los términos de referencia del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la Hidrovía Amazónica, debido a que no se cumple con los estándares internacionales de cumplimiento obligatorio identificado por el Convenio 169 de la OIT y la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).