La Asociación Indígena de Desarrollo y Conservación del Bajo Puinahua (Aidecopab), exigió justicia e investigación de la muerte de tres indígenas kukamas (Wilian López Ijuma, Chemilton Flores Crispín y Elix Ruiz Ortiz) de la comunidad nativa Bretaña, en Loreto, los cuales protestaron el pasado 8 de agosto en los exteriores de Petrotal, empresa que opera el Lote 95.
“Pedimos justicia para nuestros hermanos que han muerto y para los heridos que aún siguen abandonados. Hay quienes todavía están con municiones, están con bala en su cuerpo. Las viudas y los huérfanos no son atendidos por el Estado”, manifestó James Pérez Pacaya, presidente de la Aidecopab, al programa No Hay Derecho de Ideeleradio.
Foto: Ojo Público
López, Flores y Ruiz, junto a 400 indígenas de 18 comunidades, solicitaban la paralización de las actividades de la empresa, el envío de medicamentos y una mejor compensación por el uso del territorio indígena.
Asimismo, demandaron a Petrotal el servicio de energía eléctrica por 24 horas, un hospital rural intercultural y la entrega de un fondo económico que proceda del 10% de la producción fiscalizada de petróleo, para ejecutar proyectos de seguridad alimentaria, agua y saneamiento.
Sin embargo, en aquel momento fueron reprimidos por la Policía Nacional del Perú. El portal de periodismo de investigación Ojo-Público, accedió a los certificados de las necropsias, los cuales confirmaron que los tres hombres murieron por disparos de armas de fuego.
Por último, Pérez Pacaya pidió que los tres indígenas sean reconocidos por defender su territorio y el derecho de sus comunidades, así como sucedió con los jóvenes que marcharon en Lima en contra del gobierno de facto de Manuel Merino. “Que a ellos también se les dé este grado de reconocimiento. El ser indígena no es ser menos”, subrayó.