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Indígenas vuelven a detener construcción de represa de Belo Monte “por tiempo indefinido”

La madrugada del 27 de mayo, 200 indígenas paralizaron la construcción hasta conclusión de EIA.

 

Brasil, 27 de mayo, 2013.- La madrugada del lunes 27 de mayo cerca de 200 indígenas volvieron a paralizar la construcción de la represa Belo Monte, en el estado de Pará, hasta que se concluyan los estudios de las consecuencias ambientales que tendría el proyecto, informó la organización Xingú Vivo Para Sempre.

Según la organización no gubernamental los nativos tomaron el principal sitio de la construcción de la represa por tiempo indefinido “hasta que el Gobierno Federal converse con ellos y atienda a sus reivindicaciones”.

Ellos exigen, entre otras demandas, ser consultados por el proyecto, tal como lo establece el Convenio sobre Pueblos Indígenas núm. 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Asimismo, la organización advirtió que es la segunda ocupación de la represa en un mes.
La anterior empezó el pasado dos de mayo y finalizó una semana después, cuando los nativos abandonaron pacíficamente la represa porque el Gobierno Federal garantizó que habría una negociación, “cosa que no ocurrió”, precisó Xingú Vivo Para Sempre.

Los manifestantes exigen negociar directamente con el Gobierno Federal, a través de Gilberto Carvalho, ministro jefe de la Secretaría General de la Presidencia.

Xingu Vivo Para Sempre indica que los indígenas pertenecen a la región de Volta Grande, afincados en las orillas del río Xingu, que sería afectado por el proyecto hidroeléctrico.

“La zona cuenta con más de 100 kilómetros de río, que se secarían si el trabajo se ha completado”, señaló en su portal web.

Belo Monte

El controversial proyecto hidroeléctrico Belo Monte será uno de las más grandes del mundo y una de las principales fuentes de energía eléctrica para Brasil.

Con su capacidad de generar 11,233 megavatios en épocas de crecida del río Xingú, el proyecto inundará 526 kilómetros cuadrados de bosque amazónico, y desplazaría a cerca de 50,000 indígenas y campesinos de la ribera del mencionado río.

Fuente: Servindi.

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