Proyecto de ley impulsado por la bancada agrícola del Congreso, establece entregar al Parlamento poder sobre las tierras nativas.
Lima, 7 de octubre, 2013.- La Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA) expresó su solidaridad con los indígenas que protestaron contra el proyecto de ley del Legislativo brasileño que consideran alterará las normas que rigen la demarcación de sus tierras en favor de latifundistas, empresas mineras, madereras, entre otros.
Mediante un comunicado, la COICA, que coordina con organizaciones indígenas de nueve países, exhortó a otras a sumar fuerzas, pronunciarse y solidarizarse con las demandas de los nativos del Brasil.
El rechazo al proyecto de ley llevó a que más de mil de ellos salieran a las calles en una jornada denominada Movilización Nacional Indígena.
La movilización culminó el 5 de octubre, tuvo como centro la capital Brasilia y fue convocada por la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (Apib).
En ese contexto, la COICA resolvió solidarizarse con los nativos. “(Brasil) no puede ni debe crecer a costa de destruir la Amazonía (…) y a los pueblos que los han cuidado por milenios”, sostiene la organización en el comunicado.
La organización indígena demandó la anulación de los proyectos de ley “que buscan suprimir derechos originarios, colectivos y fundamentales”. Asimismo, la revocación de las normas que agreden derechos indígenas y el reinicio inmediato de la demarcación de las tierras indígenas asegurando su protección.
Norma resultado de un “negociado”
La cuestionada iniciativa tiene su origen en un proyecto de ley tramitado en la Cámara de Diputados el año 2000; ésta nuevamente ha retornado al debate el año pasado. La misma, impulsada por la bancada agrícola del Congreso, establece entregar al Parlamento poder sobre las tierras nativas.
“El negociado politiquero, ha llevado a que la “bancada ruralista” de latifundistas, pacte votaciones con el gobierno, y arremetan contra la titulación, los territorios, mediante represas, agronegocios y mercantilización y con el aumento de la criminalización y asesinato a quienes defienden todas las vidas de las selvas”, señala la COICA.
Los nativos están convencidos que esa modificación les daría más poder a los latifundistas y a las empresas mineras, madereras y de otras áreas que operan sobre todo en la Amazonía, donde se sitúa la mayor parte de las reservas indígenas del Brasil.
En la actualidad, la demarcación de los territorios tradicionales es una atribución exclusiva del gobierno federal, realizada por la Fundación Nacional del Indio (Funai), el Ministerio de Justicia y la Presidencia de la República.
Ejecutivo se pronuncia
El Gobierno brasileño consideró, el viernes último, inconstitucional la medida que busca entregar al Parlamento poder sobre las tierras indígenas. “Entendemos que esa medida no es solo inconveniente e inoportuna, sino que además es inconstitucional”, declaró el ministro José Eduardo Cardozo.
Fuente: SERVINDI.