Se han producido casi 500 derrames de petróleo en los últimos 20 años en la Amazonía peruana, según revela un informe publicado por la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos junto con Oxfam. 14 derrames se han producido durante esta pandemia por COVID-19, una crisis ambiental que se suma a la crisis de salud.
El estudio «La sombra del petróleo», elaborado por el subgrupo sobre derrames petroleros de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH), revela que entre 2000 y 2019 se registraron 474 fugas de petróleo en la Amazonía, las que afectaron al medioambiente, los ríos, provisión de agua, peces, alimentos y la salud de la población. La gran mayoría de ellos ocurrieron en el Lote 8 (189), el Lote 192 (155) y el Oleoducto Norperuano (94).
A ellas hay que añadirles otras 14 que se han producido durante la pandemia.
14 derrames durante la pandemia
“A nosotros nos preocupa que el petróleo llegue al río y contamine nuestro pescado, de ahí jalamos agua y tomamos nosotros. Estamos preocupados más por los niños”, dice Rosa Dahua Cuje, apu de la comunidad de 12 de Octubre, unicada al interior del Lote 192, en Loreto, en declaraciones recogidas por Convoca.pe. Y añade: “Está ya esta enfermedad [Covid-19] y viene eso. Ni medicina ni enfermera tenemos en la comunidad ahorita, el puesto de salud está cerrado”. Si alguno de los niños llegara a intoxicarse con el crudo no habría un profesional de la salud para atenderlo. “Estamos nosotros abandonados, como si no fuéramos peruanos”, se queja Dahua.
Los comuneros aguardan que los supervisores del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) visiten la planta para constatar los derrames. Según informa Convoca, miembros de OEFA llegaron a la vecina comunidad nativa Nuevo Andoas, que está también en el Lote 192, el 7 de agosto. Sin embargo, no pueden ingresar a Doce de Octubre porque el único puente que la conecta con Nuevo Andoas se ha derrumbado.
En Doce de Octubre se han producido 3 derrames en lo que va de la pandemia. Estos casos son parte de los 14 que han ocurrido en todo el Perú desde el inicio del estado de emergencia por el nuevo coronavirus, según el OEFA. La mayoría de estos derrames (8) ocurrió en el Lote 192, el más grande del país. Este espacio comprende las cuencas de los ríos Tigre, Corrientes, Pastaza y Marañón. El último incidente en este lote fue el 30 de julio.
Tres de los otros derrames tuvieron lugar en instalaciones de la empresa estatal Petroperú. Dos ocurrieron en un lote a cargo de la compañía de capitales colombianos y coreanos Savia Perú S.A., en Talara (Piura), y el último se registró en las instalaciones de la petrolera estadounidense Olympic Perú Inc. Sucursal del Perú, en Paita (Piura).
Corrosión y fallas operativas de las empresas: la razón principal
Según los registros oficiales del Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (OSINERGMIN) y del OEFA, el 65.4% de los derrames fue responsabilidad de las empresas, debido a la corrosión, fallas operativas y condiciones inseguras de las operaciones. El 28.8% fue originado por terceros y el 5.8% fue por causas naturales, como eventos climatológicos.
El Lote 192
El porcentaje de fallas operativas y de mantenimiento sube hasta el 81% en el caso específico del Lote 192, el más grande del país, operado actualmente por la empresa Frontera Energy y anteriormente por Pluspetrol.
En ese yacimiento hay detectados casi 1 200 puntos impactados por la contaminación producida por la actividad petrolera que están pendientes de ser descontaminados y cuya superficie equivale a unas 36,5 hectáreas. Los 32 sitios más impactados del Lote 192 suman un total de 364 mil 749 metros cúbicos, es decir, el equivalente a 231.5 estadios nacionales.
Sin embargo, el coste para descontaminarlos es muy grande ya que se ha calculado que harán falta más de 650 millones de soles para remediar los 32 puntos que han sido catalogados como los más urgentes.
Para ello el Gobierno peruano ha reservado un presupuesto de casi 184 millones de soles, lo que según los autores del informe apenas permitirá cubrir los gastos para descontaminar diez de estas zonas.