El potente lobby de agricultores brasileños y la construcción de hidroeléctricas en la Amazonía (sobre todo Belo Monte) genera conflictos en la Amazonía brasileña.
Brasil, 12 de junio.- Unos 150 indígenas de la Amazonía ocuparon el martes la gubernamental Fundación Nacional del Indio (FUNAI) en la capital de Brasil, parte de una escalada de protestas de los pueblos indígenas descontentos con el gobierno y con un Parlamento dominado por el lobby de agricultores.
Con sus pinturas tradicionales en la cara y el cuerpo, plumas, lanzas, arcos y flechas, unos 150 indígenas de las etnias Mundurukú, Arara, Kaiapó y Xipaia se instalaron en la sede de la FUNAI.
Ante la mirada curiosa de los brasileños, un grupo más pequeño de indígenas marchó por la capital para reclamar la atención del gobierno y el legislativo.
Los indígenas llegaron a Brasilia hace una semana para reunirse con el gobierno, tras ocupar las obras de la gigantesca hidroeléctrica de Belo Monte, que es construida en plena Amazonia y a la que se oponen. Pero la reunión no les convenció.
«El gobierno hace decretos que pasan por encima del derecho sobre nuestros territorios, construye hidroeléctricas sin consultarnos, y el Congreso quiere reformar la Constitución contra nuestros derechos», dijo a la AFP el líder indígena Valdenir Mundurukú.
Las protestas de indígenas brasileños ganaron fuerza en abril, cuando líderes de 121 etnias de todo el país tomaron el plenario de la Cámara de Diputados para reclamar sus derechos y acusaron a la presidenta Dilma Rousseff de «anti indígena» y de favorecer a los agricultores de este enorme país exportador de alimentos.
«Dilma es aliada de quien nos mata, roba nuestras tierras y nos falta al respeto», dijeron en un comunicado.
«La movilización de los indígenas es una reacción al ataque a sus derechos: el Gobierno ha frenado los procesos de reconocimiento de sus tierras y derechos indígenas reconocidos en la Constitución, están en riesgo por iniciativas en el Parlamento, dominado por el lobby de los agricultores», dijo a la AFP el secretario ejecutivo del Consejo Indigenista Misionero (CIMI), Cleber Buzatto.
Fuente: AFP